viernes, 9 de mayo de 2014

Situación actual de la chinche del eucalipto Thaumastocoris peregrinus en Argentina

Situación Actual del Control Biológico de la chinche del eucalipto Thaumastocoris peregrinus Carpintero y Dellapé, en la Argentina.
Eduardo N. Botto – IMYZA-CICVyA. INTA, Castelar.

Entre los organismos exóticos que forman parte de las múltiples invasiones biológicas que han sufrido los eucaliptos de Sudamérica en los últimos 15 años, la “chinche del eucalipto”, Thaumastocoris peregrinus Carpintero y Dellapé, (Hemiptera: Thaumastocoridae) constituye uno de los motivos de mayor preocupación para los productores forestales del Cono Sur Latinoamericano.

Este insecto de origen australiano registrado por primera vez en el país en el 2005, sobresale por su gran capacidad para dispersarse, el amplio rango de hospederas (eucaliptos) que ataca así como por los daños aparentes (defoliación intensa en ataques severos). Sumado a esto, su condición de especie invasora exótica conlleva a la evidente falta de controladores biológicos naturales para frenar su ímpetu invasor. Estos argumentos fueron en gran medida los que impulsaron en la región, la necesidad de desarrollar acciones conjuntas para el control de la plaga. En respuesta a esta preocupación, durante el transcurso de las XXI Jornadas Forestales de Concordia (2006, Entre Ríos, Argentina), por iniciativa de un grupo de investigadores de Argentina, Brasil, Chile, Uruguay y Sudáfrica, se fijaron las bases para elaborar una estrategia regional de manejo para la chinche. Se consideró entonces, que el Control Biológico (CB) de T. peregrinus mediante el empleo de Cleruchoides noackae  Lin and Huber (Hymenoptera: Mymaridae), una avispa diminuta que ataca los huevos de la chinche en su área de origen (Australia), ofrecía una alternativa potencialmente adecuada. Desde el inicio, esta propuesta, contó con el apoyo a nivel regional del Cono Sur Latinoamericano, de los principales organismos nacionales (estatales y/o privados) de cada país interviniente: Argentina 1(INTA- SENASA- SAyDS-DFS, UNLu), Brasil 2(EMBRAPA, CNPF, IPEF), Chile (SAG)3, Uruguay 4(DGSA –MGAP; INIA; UDELAR). Sumado a estos, se tuvo el apoyo de organismos Internacionales como el 5COSAVE y el 6PROCISUR. Los países contaron con total libertad en la toma de decisiones al momento de ejecutar las acciones pertinentes al manejo de la plaga, según las legislaciones vigentes en cada uno de ellos.

Las experiencias desarrolladas entre 2010 y 2013 en relación con el CB de la chinche del eucalipto en Sudamérica, han mostrado resultados preliminares muy alentadores.
La importación y empleo de un biocontrolador exótico, constituye un proceso delicado que involucra aspectos operativos complejos, no solo desde lo estrictamente biológico (ej. selección acertada del biocontrolador, importación, cuarentena, cría y posterior manejo en el campo), sino también desde los aspectos legales que rigen tanto a nivel nacional como internacional (ej., legislación de aspectos fitosanitarios y/o ambientales) que deben considerarse. Respecto de este último aspecto, resulta de importancia la posición adoptada por cada país respecto de la Convención Internacional sobre Biodiversidad (2010), a la cual han adherido numerosos países, entre ellos la Argentina.

En el 2010, Chile se convirtió en el primer país sudamericano en introducir exitosamente desde Australia a C. noackae. Posteriormente a su cuarentena, el biocontrolador fue liberado y recobrado en plantaciones no comerciales de eucaliptos situadas en la cercanía de Santiago de Chile. Más recientemente (2013) tanto Brasil en primera instancia como Uruguay posteriormente, lograron similares propósitos (introducir, criar, liberar y recobrar al parasitoide) luego de su colonización en el campo. Brasil introdujo C. noackae desde Australia mientras que Uruguay lo importó desde el Brasil. Cabe mencionar que el éxito obtenido por estos dos países, en la importación y colonización del parasitoide, requirió de repetidas importaciones del mismo, debido a las dificultades técnicas que planteó el manejo en cuarentena del complejo sistema biológico T. peregrinus - C. noackae. Una situación similar se dio en Sudáfrica donde el biocontrolador también fue introducido exitosamente luego de varios intentos.

Son muchos los aspectos técnicos que aparecen como potenciales limitantes para alcanzar el objetivo de una introducción exitosa de C. noackae destacándose la disponibilidad en tiempo (momento adecuado), forma (calidad biológica, proporción sexual) y cantidad (tamaño de las colonias fundadoras), tanto del huésped (desoves de la chinche) como del biocontrolador (avispa). A modo de ejemplo vale mencionar que los adultos de C. noackae viven en promedio 1,5 a 3 días, y que los desoves de la chinche presentan un estado óptimo de aceptación por parte de los parasitoides que no supera las 72h. Esto da una pauta de lo afinado que deben estar los sistemas de cría de ambos organismos (plaga-controlador) para lograr el objetivo.

La introducción de C. noackae en la Argentina pudo concretarse recién el 16 de Noviembre de 2013, tras varios años de iniciar la gestión para su importación. Programada su importación para el verano de 2012, esta no pudo concretarse debido a que las condiciones climáticas en Australia (temperaturas extremas), diezmaron las poblaciones naturales tanto de T. peregrinus como de C. noackae. Esto no sólo retrasó una temporada más la introducción del enemigo natural, sino que motivó el inicio de nuevas gestiones para su importación desde otro lugar. Afortunadamente, el parasitoide se importó desde el Uruguay, y actualmente se está multiplicando en la Cuarentena de Castelar donde se aguarda el nacimiento de la tercera generación del biocontrolador (Figuras 1-6). El material deberá permanecer en la Cuarentena, hasta satisfacer los requisitos exigidos por las normativas vigentes a nivel nacional- internacional respecto de la bioseguridad ambiental, previo a su liberación en el campo.

La introducción de C. noackae en la Argentina, fue posible gracias a la interacción positiva entre los investigadores del Insectario de Investigaciones de Lucha Biológica del IMYZA (CICVyA, INTA-Castelar) de la Argentina y el INIA Tacuarembó del Uruguay. La firma de un Acuerdo de Transferencia de Materiales entre el INIA y el INTA convalidó la “cooperación horizontal” establecida para el control biológico de T. peregrinus en la región y posibilitó que fuera avalada, entre otros, por el Proyecto Cooperativo Regional: Nivelación de Capacidades Regionales para el Control Biológico de la chinche del eucalipto (PROCISUR) y por el “Plan Regional de Vigilancia y Control de la chinche de los eucaliptos Thaumastocoris peregrinus” (COSAVE).

Asimismo, merecen mencionarse por su participación en esta gestión a la Universidad de Sidney (Australia), por haber sido el proveedor original de C. noackae para la Región y quienes suministraron la información básica inicial sobre T. peregrinus y C. noackae; EMBRAPA-IPEF (Brasil), como proveedor del biocontrolador y la trasmisión de su experiencia en la cría de C. noackae a Uruguay; a SENASA, SAyDS y UNLu (Argentina) y la DGSA-MGAP (Uruguay) por sus aportes en la gestión de importación del parasitoide y al SAG (Chile) y FABI (Sudáfrica)por sus trabajos “pioneros” en lo que se refiere al manejo de C. noackae en Cuarentena.

Figuras: 1 a-b
Cápsulas de Petri con trocitos (1a) de hoja de eucalipto con huevos de Thaumastocoris peregrinus parasitados por Cleruchoides noackae, (material recibido del INIA Tacuarembó, Uruguay), dispuestos en la sala de cría (1b) de la Cuarentena del IILB-IMZA. INTA, Castelar (Noviembre 16, 2013)

1a)                                                                                                    


1b)
     

Figuras: 2 a-b: Adultos de Cleruchoides noackae (hembras) emergidos en la Cuarentena del IILB-IMYZA (2a). Dispositivos (tubos de vidrio) empleados para la exposición de huevos de la chinche a los parasitoides (2b).

 2a)
 
2b)

 

  

Figuras: 3 a-b: Hembra de C. noackae (flecha) parasitando huevos de T. peregrinus (3a) y Evolución del parasitismo de T. peregrinus por C. noackae en la Cuarentena del IILB-IMYZA para la generación parental (P1ARG1b) y las filiales primera (F1ARG1b) y segunda (F2ARG1b) deC. noackae (3b); los números en las columnas representan la cantidad de huevos de la chinche expuestos al biocontrolador.

3a)                                                                                            
   
   

3b)


Abreviaturas
1
INTA: Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria. Argentina.
SENASA: Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria. Argentina.
SAyDS-DFS: Secretaria de Ambiente y Desarrollo Sustentable. Dirección de Fauna Silvestre. Argentina.
UNLu: Universidad Nacional de Luján. Argentina.
2
EMBRAPA: Empresa Brasilera de Pesquisa Agropecuaria. CNPF (EMBRAPA Florestas). Brasil.
IPEF: Instituto de Pesquisas e Estudos Florestais. Brasil.  
3
SAG: Servicio Agrícola y Ganadero. Chile. 
4
DGSA: Dirección General de Servicios Agrícolas. Uruguay.
MGAP: Ministerio Agricultura Ganadería y Pesca. Uruguay.
INIA: Instituto Nacional de Investigación Agropecuaria. Uruguay.
UDELAR: Universidad de La República. Uruguay.
5
COSAVE: Comité Sanidad Vegetal (Argentina, Brasil, Chile, Paraguay, Uruguay).
PROCISUR: Programa Cooperativo para el Desarrollo Tecnológico Agroalimentario del Cono Sur.

FUENTE: Boletín Novedades Forestales Nro. 432, INTA Concordia.