viernes, 5 de octubre de 2018

XXXII Jornadas Forestales de Entre Ríos


Los días 4 y 5 de octubre en el predio de la EEA Concordia del INTA se llevó a cabo una nueva edición de las Jornadas Forestales de Entre Ríos, tradicionalmente organizadas por el INTA Concordia y la Asociación de Ingenieros Agrónomos del NE de Entre Ríos (AIANER).

A continuación se presenta un breve raconto de los temas abordados durante el evento, sus disertantes y los aspectos más salientes en cada caso. Como siempre, las disertaciones técnicas llevadas a cabo durante el primer día se dividieron en paneles temáticos: sanidad, silvicultura, y actualidad y mercado. La segunda jornada del evento se inició con un panel de autoridades y representantes del sector donde se expusieron novedades y se debatió sobre la situación que atraviesa el sector foresto industrial.

En el panel de sanidad, moderado por Sergio Ramos de INTA Concordia, Carmen Hernández y Andrea Andorno de IMYZA-INTA Castelar comentaron aspectos alentadores en  el control biológico de avispas que producen agallas en eucaliptos. En ese sentido, destacaron la aparición espontánea de dos controladores: Quadrastichus mendeli y Closterocerus chamaeleon parasitoides de Leptocybe invasa y Ophelimus maskelli. respectivamente; y sus buenos niveles de parasitismo en nuestra región. Tambien hicieron alusión a las primeras liberaciones en 2018 del biocontrolador de la avispa de la agalla Selitrichodes neseri en Concordia. Las primeras muestras del establecimiento de este biocontrolador están siendo evaluadas y se harán nuevas liberaciones durante la primavera-verano.

A continuación Gonzalo Martínez de Uruguay, en co-autoría con Roberto Scoz del INIA Tacuarembó, presentó resultados de monitoreo de la chinche del eucalipto (Thaumastocoris peregrinus) y cómo han bajado los niveles poblacionales desde su estallido en 2008-09. Asimismo, mostró la cría y liberación del parasitoide Cleruchoides noacke. Destacó que el controlador fue recobrado en sitios de liberación donde anteriormente no aparecían lo cual resulta alentador con vistas a su establecimiento a pesar de que los niveles poblacionales de chinche sean bajos. Reportó que por primera vez ya se ha logrado detectar poblaciones silvestres en el Uruguay, tras sucesivas liberaciones, abriendo buenas perspectivas para su control.

Finalmente, Martín Bollazzi de la Universidad de la República de Uruguay, se refirió al control de hormigas cortadoras, considerada la principal plaga “tradicional” forestal en Sudamérica y con crecientes restricciones en el control químico por parte de los organismos certificadores. Hizo hincapié en la necesidad de conocer su biología para aplicar eficientemente las medidas de control. Se refirió al comportamiento de estos insectos y a partir de allí cómo el cebo es el mejor método de control hasta el momento. También resaltó que los hormigueros se ubican preferentemente próximos al borde del lote por cuestiones de sombreamiento y que las mejores épocas de control son durante primavera y verano, amén de brindar datos interesantes sobre el peso de los cebos en relación a la edad de la colonia.

En el panel de Silvicultura, moderado por Javier Oberschelp del INTA Concordia, primeramente Nicolás Stahringer, de la Universidad del Nordeste UNNE pero que se encuentra realizando su posgrado en suelos y fertilidad en la Universidad Federal de Viçosa, Brasil, comentó el concepto de “balance nutricional” que se emplea para el diagnóstico y remediación mediante fertilización, donde la misma debe estar adecuada a la meta fijada, teniendo en cuenta la demanda y la fase del cultivo para obtener resultados óptimos y sostenidos. Un dato destacado fue el de tener en cuenta la “exportación” de nutrientes según el método de cosecha y su importancia en el contenido nutricional.

Por parte del INTA Concordia y Bella Vista, Federico Caniza y María de los Ángeles García comentaron sobre resultados que se van teniendo en la Mesopotamia con prácticas silviculturales como raleo, fertilización y densidades de plantación inicial empleando materiales clonales y de semillas. Señalaron la importancia de la selección del material genético según el sitio que se desea implantar, no resultando siempre el material clonal la alternativa más conveniente.

En segunda instancia, Juan López y Ciro Mastrandrea, también de INTA Bella Vista y Concordia, presentaron evaluaciones a nivel de rollos y de tablas referidas a la calidad de madera de distintos materiales genéticos. Por su parte López comentó que desde hace tiempo se ha incorporado lo referido a “índice de rajado de rollizos” en el mejoramiento (las rajaduras son una importante causa de merma en la industrialización), el cual resulta altamente hereditario, lo que le abre un interesante panorama en los procesos de selección y mejoramiento. En este mismo sentido, Mastrandrea mostró los resultados de examinar las tablas obtenidas de diferentes clones en distintos sitios, evaluando no solo las rajaduras sino también su densidad y el módulo de elasticidad, que es un parámetro importante para su uso estructural. Destaca que los clones responden diferencialmente y que los materiales de semilla en general presentan buenos parámetros respecto de las propiedades monitoreadas; hecho por el cual resulta de gran importancia seleccionar el material en función de las características del sitio y del objetivo de producción perseguido.




En cuanto al panel de Actualidad y Mercado comenzó con lo que podríamos denominar el sector forestal de hoy y ayer. Carlos de la Peña, de INTA  Concordia, realizó una reseña de cómo fue la evolución del sector forestal de Entre Ríos relacionándola con los sistemas de promoción sucesivos (créditos, blandos, desgravaciones, fomento en cuotas de la ley 21.695, llegando al actual régimen de fomento Ley 25.080 y su prórroga que contempla apoyo económico no reintegrable y beneficios fiscales). Asimismo comentó cómo la zona comenzó allá por el 1940 industrializando madera nativa de Misiones que bajaba en Jangadas, pasando a una época “del pino” el cual finalmente fue reemplazado en gran medida por el eucalipto. Es así como se llega a la actualidad, donde  Mario Flores, de la Dirección Nacional de Desarrollo Foresto Industrial comentó los datos salientes de los recientes censos de aserraderos e inventario de plantaciones, siendo que a Septiembre de 2016 Entre Ríos contaba con una superficie de 131.600 ha de plantaciones, distribuidas principalmente en los departamentos de Concordia (46,4%), Colón (27%) y Federación (16,5%). En cuanto a las especies, un 89 % corresponde al género Eucalyptus y el 11 % restante a Pinus sp. En términos de volumen se estimaron existencias por algo más de 27 millones de m3; en cuanto al censo de aserraderos 2016-2017 se contabilizaron 179 aserraderos, que ocupan en forma directa a casi 3000 personas, consumiendo 2.1 millón de m3, (1.8 de eucalipto), generando una producción de 330 millones de pie2 por año.

A continuación, Ronald Vera, consultor especialista en maquinaria para la industria forestal, expuso un interesante punto de vista en lo referido a cambios en el enfoque de la industrialización de la madera y el nuevo paradigma en el sector forestal. Conocedor del sector forestal del país, de los países vecinos y de varios países forestales, comentó sobre lo obsoleto del parque forestoindustrial (con excepción de la maquinaria de cosecha de monte, donde hay tecnología de buen nivel internacional), y la necesidad de tecnificarse y pensar en otras escalas de producción.

Finalmente, Juan Morales, de Forestal Argentina S.A se refirió a las posibilidades de exportación que se presentan para la región. Con un enfoque centrado en mercados que se abren en función de los volúmenes y precios de las materias primas, destacó que el pino como comoditie, por la oferta existente de rollos y tablas, y especialmente por su precio (más bajo respecto del eucalipto) puede ser una alternativa interesante para salir al exterior (ya está haciendo las primeras experiencias en este sentido). Resaltó la importancia de la infraestructura portuaria destacando la necesidad de adecuar los puertos entrerrianos y las condiciones favorables que ofrece hoy día el puerto de campana por sobre los demás, en este tipo de exportación.

La segunda jornada se inició con una mesa panel de técnicos/autoridades de instituciones/cámaras integrado por Lorna Sacks (área forestal de la Secretaría de Producción de Entre Ríos), Mario Flores (Técnico Regional de la Dirección Nacional de Desarrollo Foresto Industrial), Alejandro Giudici (presidente de AFoA Río Uruguay); Sergio Piana (presidente de IMFER, Industriales Madereros de Entre Ríos y sur de Corrientes) y Marcos Follonier (responsable del Consejo de la Producción de la Municipalidad de Concordia). En esta mesa interinstitucional se debatió la situación actual y perspectivas de la actividad forestal en la región.



Al finalizar esta mesa se desarrolló el tradicional día de campo. En ese marco se realizó una demostración de maquinarias en un lote de la estación experimental del INTA. En la primera parada, se pudo observar la cosecha mecanizada de una plantación de Eucaliptos con un procesador John Deere con cabezal de Waratah comercializado por PALMERO, y perteneciente a la empresa de servicios forestales “Palo Alto”. En el mismo lote, se mostró el trabajo de una cargadora forestal desarrollada y comercializada por la Empresa Arlettaz Hidráulica de San José, Entre Ríos. En la segunda parada se mostraron dos implementos fabricados por la metalúrgica Uruguaya Hartwich, una rastra pesada con subsolador para hacer preparación de suelo en camellones o taipas, con un tractor de 100 HP, para solo trabajar la franja de plantación, en especial en replantaciones, y un aplicador de cebo hormiguicida mecanizado automático, que actúa  programándose por tiempo, por distancia o por gps. Ambas maquinarias pertenecen a la empresa de servicios “El Ombú” y son comercializadas por Tractopartes S.A. Las explicaciones estuvieron a cargo del Ing. Marcos Von Wernich de la AIANER quien habitualmente colabora en el día de campo.