Los días 4 y 5 de octubre en el predio de la EEA Concordia del INTA se llevó a cabo una nueva edición de las Jornadas Forestales de Entre Ríos, tradicionalmente organizadas por el INTA Concordia y la Asociación de Ingenieros
Agrónomos del NE de Entre Ríos (AIANER).
A continuación se
presenta un breve raconto de los temas abordados durante el evento, sus
disertantes y los aspectos más salientes en cada caso. Como siempre, las
disertaciones técnicas llevadas a cabo durante el primer día se dividieron en
paneles temáticos: sanidad, silvicultura, y actualidad y mercado. La segunda
jornada del evento se inició con un panel de autoridades y representantes del
sector donde se expusieron novedades y se debatió sobre la situación que
atraviesa el sector foresto industrial.
En el panel de sanidad,
moderado por Sergio Ramos de INTA Concordia, Carmen Hernández y Andrea
Andorno de IMYZA-INTA Castelar comentaron aspectos alentadores en
el control biológico de avispas que producen agallas en eucaliptos.
En ese sentido, destacaron la aparición espontánea de dos controladores: Quadrastichus mendeli y Closterocerus chamaeleon parasitoides de Leptocybe invasa y Ophelimus maskelli. respectivamente;
y sus buenos niveles de parasitismo en nuestra región. Tambien hicieron alusión
a las primeras liberaciones en 2018 del biocontrolador de la avispa de la
agalla Selitrichodes neseri en
Concordia. Las primeras muestras del establecimiento de este biocontrolador
están siendo evaluadas y se harán nuevas liberaciones durante la
primavera-verano.
A continuación Gonzalo
Martínez de Uruguay, en co-autoría con Roberto Scoz del INIA
Tacuarembó, presentó resultados de monitoreo de la chinche del eucalipto (Thaumastocoris peregrinus) y cómo han
bajado los niveles poblacionales desde su estallido en 2008-09. Asimismo,
mostró la cría y liberación del parasitoide Cleruchoides noacke. Destacó que el controlador fue recobrado en
sitios de liberación donde anteriormente no aparecían lo cual resulta alentador
con vistas a su establecimiento a pesar de que los niveles poblacionales de
chinche sean bajos. Reportó que por primera vez ya se ha logrado detectar poblaciones
silvestres en el Uruguay, tras sucesivas liberaciones, abriendo buenas
perspectivas para su control.
Finalmente, Martín
Bollazzi de la Universidad de la República de Uruguay, se refirió
al control de hormigas cortadoras, considerada la principal plaga
“tradicional” forestal en Sudamérica y con crecientes restricciones en el
control químico por parte de los organismos certificadores. Hizo hincapié en la
necesidad de conocer su biología para aplicar eficientemente las medidas de
control. Se refirió al comportamiento de estos insectos y a partir de allí cómo
el cebo es el mejor método de control hasta el momento. También resaltó que los
hormigueros se ubican preferentemente próximos al borde del lote por cuestiones
de sombreamiento y que las mejores épocas de control son durante primavera y
verano, amén de brindar datos interesantes sobre el peso de los cebos en
relación a la edad de la colonia.
En el panel de
Silvicultura, moderado por Javier Oberschelp del INTA Concordia,
primeramente Nicolás Stahringer, de la Universidad del Nordeste UNNE
pero que se encuentra realizando su posgrado en suelos y fertilidad en la
Universidad Federal de Viçosa, Brasil, comentó el concepto de “balance
nutricional” que se emplea para el diagnóstico y remediación mediante
fertilización, donde la misma debe estar adecuada a la meta fijada, teniendo en
cuenta la demanda y la fase del cultivo para obtener resultados óptimos y
sostenidos. Un dato destacado fue el de tener en cuenta la “exportación” de
nutrientes según el método de cosecha y su importancia en el contenido nutricional.
Por parte del INTA
Concordia y Bella Vista, Federico Caniza y María de los Ángeles
García comentaron sobre resultados que se van teniendo en la
Mesopotamia con prácticas silviculturales como raleo, fertilización
y densidades de plantación inicial empleando materiales clonales y de semillas.
Señalaron la importancia de la selección del material genético según el sitio
que se desea implantar, no resultando siempre el material clonal la
alternativa más conveniente.
En segunda instancia, Juan
López y Ciro Mastrandrea, también de INTA Bella Vista y Concordia,
presentaron evaluaciones a nivel de rollos y de tablas referidas a
la calidad de madera de distintos materiales genéticos. Por su parte
López comentó que desde hace tiempo se ha incorporado lo referido a “índice de
rajado de rollizos” en el mejoramiento (las rajaduras son una importante causa
de merma en la industrialización), el cual resulta altamente hereditario, lo
que le abre un interesante panorama en los procesos de selección y mejoramiento.
En este mismo sentido, Mastrandrea mostró los resultados de examinar las tablas
obtenidas de diferentes clones en distintos sitios, evaluando no solo las
rajaduras sino también su densidad y el módulo de elasticidad, que es un
parámetro importante para su uso estructural. Destaca que los clones responden
diferencialmente y que los materiales de semilla en general presentan buenos
parámetros respecto de las propiedades monitoreadas; hecho por el cual resulta
de gran importancia seleccionar el material en función de las características
del sitio y del objetivo de producción perseguido.
En
cuanto al panel de Actualidad y Mercado comenzó con lo que podríamos denominar
el sector forestal de hoy y ayer. Carlos de la Peña, de INTA
Concordia, realizó una reseña de cómo fue la evolución del sector forestal
de Entre Ríos relacionándola con los sistemas de promoción sucesivos (créditos,
blandos, desgravaciones, fomento en cuotas de la ley 21.695, llegando al actual
régimen de fomento Ley 25.080 y su prórroga que contempla apoyo económico no
reintegrable y beneficios fiscales). Asimismo comentó cómo la zona comenzó allá
por el 1940 industrializando madera nativa de Misiones que bajaba en Jangadas,
pasando a una época “del pino” el cual finalmente fue reemplazado en gran
medida por el eucalipto. Es así como se llega a la actualidad, donde Mario
Flores, de la Dirección Nacional de Desarrollo Foresto Industrial comentó
los datos salientes de los recientes censos de aserraderos e inventario de
plantaciones, siendo que a Septiembre de 2016 Entre Ríos contaba con una
superficie de 131.600 ha de plantaciones, distribuidas principalmente en los
departamentos de Concordia (46,4%), Colón (27%) y Federación (16,5%). En cuanto
a las especies, un 89 % corresponde al género Eucalyptus y el
11 % restante a Pinus sp. En términos de volumen se estimaron
existencias por algo más de 27 millones de m3;
en cuanto al censo de aserraderos 2016-2017 se contabilizaron 179 aserraderos,
que ocupan en forma directa a casi 3000 personas, consumiendo 2.1 millón
de m3, (1.8 de eucalipto), generando una producción de 330
millones de pie2 por
año.
A continuación, Ronald
Vera, consultor especialista en maquinaria para la industria forestal, expuso
un interesante punto de vista en lo referido a cambios en el enfoque de la
industrialización de la madera y el nuevo paradigma en el sector forestal.
Conocedor del sector forestal del país, de los países vecinos y de varios
países forestales, comentó sobre lo obsoleto del parque forestoindustrial (con
excepción de la maquinaria de cosecha de monte, donde hay tecnología de buen
nivel internacional), y la necesidad de tecnificarse y pensar en otras escalas
de producción.
Finalmente, Juan
Morales, de Forestal Argentina S.A se refirió a las posibilidades de exportación
que se presentan para la región. Con un enfoque centrado en mercados que se
abren en función de los volúmenes y precios de las materias primas, destacó que
el pino como comoditie, por la oferta existente de rollos y tablas, y
especialmente por su precio (más bajo respecto del eucalipto) puede ser una
alternativa interesante para salir al exterior (ya está haciendo las
primeras experiencias en este sentido). Resaltó la importancia de la
infraestructura portuaria destacando la necesidad de adecuar los puertos
entrerrianos y las condiciones favorables que ofrece hoy día el puerto de
campana por sobre los demás, en este tipo de exportación.
La segunda jornada se
inició con una mesa panel de técnicos/autoridades de
instituciones/cámaras integrado por Lorna Sacks (área forestal de la
Secretaría de Producción de Entre Ríos), Mario Flores (Técnico Regional de la Dirección Nacional de Desarrollo Foresto Industrial), Alejandro
Giudici (presidente de AFoA Río Uruguay); Sergio Piana (presidente
de IMFER, Industriales Madereros de Entre Ríos y sur de Corrientes) y Marcos
Follonier (responsable del Consejo de la Producción de la Municipalidad de
Concordia). En esta mesa interinstitucional se debatió la situación actual y
perspectivas de la actividad forestal en la región.
Al finalizar esta mesa se
desarrolló el tradicional día de campo. En ese marco se realizó una demostración
de maquinarias en un lote de la estación experimental del INTA. En la primera
parada, se pudo observar la cosecha mecanizada de una plantación de Eucaliptos
con un procesador John Deere con cabezal de
Waratah comercializado por PALMERO, y perteneciente a la empresa
de servicios forestales “Palo Alto”. En el mismo lote, se mostró el trabajo de
una cargadora forestal desarrollada y comercializada por la
Empresa Arlettaz Hidráulica de San José, Entre Ríos. En la segunda
parada se mostraron dos implementos fabricados por la metalúrgica
Uruguaya Hartwich, una rastra pesada con subsolador para hacer preparación
de suelo en camellones o taipas, con un tractor de 100 HP, para solo trabajar
la franja de plantación, en especial en replantaciones, y un aplicador de cebo
hormiguicida mecanizado automático, que actúa programándose por
tiempo, por distancia o por gps. Ambas maquinarias pertenecen a la empresa de
servicios “El Ombú” y son comercializadas por Tractopartes S.A.
Las explicaciones estuvieron a cargo del Ing. Marcos Von
Wernich de la AIANER quien habitualmente colabora en el día de campo.